esqui

esqui
un deporte para todos

martes, 19 de febrero de 2013

NADAL

Vuelve Nadal. Regresa pese a sentir aún molestias en el tendón de su rodilla. La primera pregunta es si puede un deportista jugar con dolor. Depende de la fase de la tendinosis. Puede sufrir molestias al terminar los esfuerzos, durante o antes y después de los mismos. Hay cuatro fases clínicas de la lesión: Grado 1: Dolor sólo al acabar la actividad física. Cede con el reposo y no limita la actividad. Grado 2: Molestias durante y después de la actividad física. El paciente puede hacer su actividad física con molestias. Grado 3: Dolor durante y después de la actividad física, que se ve mermada por el mismo. Y grado 4: molestias durante las actividades de la vida diaria. Puede llegar a producirse la ruptura del tendón. Rafa tuvo una parcial, a nivel del polo distal de la rótula, del tendón rotuliano, según informó elDr. Ruiz Cotorro, y una inflamación de la grasa de Hoffa, que rodea la rótula. Con frecuencia en estas tendinopatías crónicas, la imagen en la ecografía y la resonancia magnética es satisfactoria, pero algunos pacientes siguen con dolor. Los médicos no sabemos por qué. Ojalá los nuevos ecógrafos-elastógrafos de última generación nos permitan ver más allá, la elasticidad del nuevo colágeno, y poder reclasificar e interpretar el grado de lesión y el pronóstico clínico. Estos puntos oscuros en la ciencia de las tendinopatías suponen hoy un desafío para un deportista de élite, para su equipomédico y técnico y para la reincorporación a la competición. Con frecuencia se aconseja al deportista que vaya poniéndose a prueba, complementando su entrenamiento específico con otros deportes menos traumáticos (bici, natación…) y buscando sus límites y administrando sus descansos y fases de recuperación. En esta fase podría estar Rafa. La mayoría de los deportistas consiguen, poco a poco, olvidar el dolor y en semanas omeses, es impredecible, recuperan su condición física y se olvidan de su enfermedad. Otras veces el deportista no encuentra el equilibrio, no se consigue la desensibilización de la zona y, pese a que las pruebas de imagen actuales digan que el tendón está regenerado, el dolor vuelve y limita la actividad. En este caso, el camino es más tortuoso. Las tendinopatías han obligado a superatletas a cambiar su técnica de carrera (Haile Gebrselassie) o de salto (Bob Beamon). Nadal sorprende a los profesionales, técnicos y estudiosos de la biomecánica y la fisiología del esfuerzo por su técnica de golpeo. Con un giro coordinado de su cuerpo, de hasta 90º, arrancando el movimiento del brazo desde abajo y desde atrás,manteniendo el brazo recto, golpeando la pelota cuando empieza a caer y con un giro imposible de muñeca en el tramo final de su golpeo, consigue que la pelota tenga mucha más inercia de giro que lamedia de los profesionales de élite del circuito. Los jugadores profesionales de tenis imprimen a sus golpes una fuerza capaz de hacer girar la pelota a una media de 2.700 revoluciones por minuto. Nadal imprime una media de 3.300 revoluciones por minuto (500 más que Federer y 1.500 por encima de Pete Sampras) con picos de 4.900, y pasa la pelota sobre la red con más margen que otros tenistas. Cuando la pelota bota, esas revoluciones la impulsan hacia delante con muchísima inercia, haciendo difícil la respuesta para el rival. Patrick McEnroe, manager general para el desarrollo de la Asociación de Tenis de los Estado Unidos (U.S.T.A), afirma: «Si los golpes de Nadal te pillan en posición defensiva, es imposible mantener la defensamás de dos o tres golpes». Este modo de golpear va, poco a poco, madurando el punto, algo que en tierra batida se ha comparado con una partida de ajedrez en la que cada movimiento (desplazando al rival a un lado y otro de la pista), cada golpe, es una parte de los siguientes, del jaque mate final. Además, el campeón puede, con su extraordinaria movilidad, cambiar su estrategia de defensa a ataque. Pero esta técnica, esta movilidad y el mantener siempre el balance y el centro de gravedad conlleva un sobreesfuerzo complementario de las piernas. Para ir ganando, poco a poco, terreno al rival, el golpeo exige que Rafa llegue a tiempo para posicionarse, asentar las piernas, colocar el cuerpo y poder desarrollar todo su potencial en cada golpe. Con su peso y altura, este esfuerzo es un permanente castigo para sus rodillas, que han de frenar la inercia y la energía de sus desplazamientos para volver a recuperar la posición.Y así, jugando cada punto como si fuera el último, hasta que llega la temida tendinopatía, la fase final, la manifestación clínica de un microtraumatismo repetido, momento en que la estructura del tendón ya está alterada (incluso conmicrorroturas). Aquí inició Rafa el camino de la recuperación, que pasa por la regeneración del tendón con la infiltración de plasma rico en factores de crecimiento u otras terapias biológicas. Pero el origen, las causas biomecánicas, los microtraumatismos, el modo de jugar siguen ahí, una vez recuperado el tendón, amenazando al deportista. ¿Cuál será el camino de Rafa ahora? Aunque le respondan las rodillas, es probable que nuestro campeón quiera cuidarse y dosificarse seleccionando los mejores torneos y que modifique o perfeccione parte de su repertorio técnico ganando eficiencia. Y esa progresión técnica no le hará perder ni un ápice de su voluntad y entrega. Manuel Villanueva y Álvaro Iborra son expertos enmedicina deportiva, terapias regenerativas y miembros de la plataforma ‘Tulesiondeportiva.com’.

No hay comentarios:

Publicar un comentario